03 mayo 2009

Delirio de Fregoli, a propósito de un caso.

Caso clínico

Paciente mujer de 22 años de edad que acude a nuestra consulta por presentar, desde hace unos meses -aproximadamente medio año- síntomas ansiosos que están interfiriendo en su vida relacional. Explica sintomatología autorreferencial ("en la discoteca, siento que la gente me mira, habla de mi", "el otro día, creía que mi madre había puesto un vídeo en la televisión para ponerme nerviosa, pero no, me di cuenta de que no había sido mi madre, que en la TV hablaban de mi"). Explorada la paciente, afirma haber sido policonsumidora (éxtasis, ketamina, cocaína), pero que ahora "sólo" consume cocaína -"y menos"- los fines de semana.
Cuando va a terminar la entrevista -como ocurre en multitud de ocasiones, en las que los pacientes sólo se atreven a mostrar el verdadero motivo de la consulta en este momento- la paciente añade: "además, en un par de ocasiones, he creido que alguien en la discoteca era mi novio, disfrazado, por lo que he tenido que, incluso, pedirle el DNI para confirmarlo. Y esto no es normal, ¿no?


Comentario

Entre los abundantes epónimos (del griego ἐπώνυμος) utilizados en el lenguaje médico, son pocos los que no hacen referencia al científico que describió o que más aportó al conocimento de la estructura, proceso, signo, síndrome o enfermedad al que se refiere. Unos pocos hacen referencia a personajes de ficción que padecían tal síndrome (como el cochero obeso de "Los papaeles póstumos del club Pickwick"). Sin embargo, aún menos son los que hacen referencia a algún personaje histórico que mostrara tales o cuales síntomas o rasgos. El más clásico de éstos es, quizá el de "safismo" o "lesbianismo" para referirse a la tendencia homosexual de la mujer, en recuerdo de la poetisa griega Safo de Lesbos (ca. 650-580 a.C) o el "daltonismo" para hacer refencia a la discromatopsia que sufrió el físico británico John Dalton (1766-1844). Más raro aún es el caso que nos ocupa-de hecho, corríjame el lector si me equivoco, es el único caso en nuestro Lenguaje- , en el que el "protagonista" del epónimo es un personaje histórico que no padeció síndrome alguno, pero que era conocido por hacer realidad una idea delirante. En el síndrome de Fregoli, el paciente cree que una persona va disfrazándose de otras para perseguirla. Este epónimo, acuñado por el psiquiatra francés Henri Ey (1900-1977) hace referencia al artista italiano Leopoldo Fregoli (1867-1936), que tenía la habilidad de hacer cambios de indumentaria inmediatos tras un biombo, que era el núcleo de sus actuaciones. Así, el que podía haber sido síndrome de Ey o de Sherlock Holmes (que cree muchas veces que personas a su alderredor son el profesor Moriarty disfrazado)(1), se convirtió en el Delirio de Fregoli.
Esta entidad psicopatológica está emparentada con el delirio de Capgras (en el que el paciente cree que personas conocidas no son ellas, sino que son otras disfrazadas de ellas), formando un grupo denominado "Síndromes de falsa identificación". Se tratan de sintomatología paranoica no necesariamente asociado a enfermedad esquizofrénica, sino que aparecen en enfermedades orgánicas, como la demencia, o en otra serie de enfermedades psiquiátricas, como el trastorno bipolar o, como es el caso que nos ocupa, al trastorno por consumo de sustancias.
Dejo aquí abiertos varios debates: ¿habeis observado en la consulta de atención primaria actitudes fregolioides en ancianos predemenciados o demenciados?;¿Corresponde con un trastorno psicótico paranoide el hecho de que la paciente haga crítica de su situación, o más bien orienta a que tenga que ver con sintomatología secundaria a consumo?; ¿Se os ocurre algún otro epónimo médico que haga referencia a una habilidad no patológica de algún personaje histórico?

Raúl Velasco Morgado

(1) El apunte sobre el personaje de Sir Arthur Conan Doyle se lo debo al adjunto de Psiquiatría, el Dr. Juan Bellido.

Imágenes: La imagen superior corresponde a la obra de Eugenio S. Dalí titulada "El busto de Voltaire que está desapareciendo" (1940). Los estudios del genio catalán sobre dobles imágenes son , sin duda, la base estética de la falsa identíficación. La otra se corresponde con un retrato fotográfico de Leopoldo Fregoli

1 comentario:

Anónimo dijo...

Hola, hemos visto su comentario sobre el trastorno de Frégoli y nos gustaría ponernos en contacto con usted si es posible, ya que estamos preparando un documental sobre Leopoldo Frégoli, relacionado también con la historia del cine.

MUCHAS GRACIAS.

JAVIER MOSQUEDA.

javi_mosqueda@yahoo.es
thecolormaker@gmail.com

http://www.imdb.com/name/nm2239888/